Rafa Nadal ha demostrado que sigue siendo el rey de la tierra batida. Consiguió derrotar a su “bestia negra” (Novak Djokovic), después de 7 derrotas consecutivas. Además sigue haciendo historia con sus récords: 20 victorias en masters superando a Roger Federer y el primero en ganar 8 veces consecutivas un mismo torneo. Además, su eterno hándicap a mejorar, el saque, esta vez le funcionó a las mil maravillas en todo el torneo. Sin ningún set perdido, se plantó en la final con una seriedad extrema. Allí siguió su guión a la perfección con un excelente tenis, casi sin errores no forzados, con su mejorado servicio y sus devoluciones imposibles para otros, hicieron que la final se acortara a poco más de hora y cuarto.
El Serbio no estuvo a la altura del número uno en todo el torneo, posiblemente le influenció la pérdida de su abuelo el pasado jueves. Tuvo unos rivales relativamente fáciles hasta semifinales, donde Berdych sí que le plantó cara y casi da la campanada del torneo.
De todas formas, Djokovic aumenta la distancia en el ránking ya que el año pasado no había participado y Rafa defendia el título. Ahora veremos como afecta a ambos este resultado de cara a los próximos torneos.
Debemos destacar a Berdych y Simon. Los semifinalistas demostraron adaptarse muy bien a la tierra de Montecarlo después de llegar a este torneo con unos números bastante negativos. Berdych derrotó a Nishikori y nos sorprendió a todos al vencer a un gris Murray. Consiguió ganar un set a Djokovic pero le faltó algo de confianza y continuidad para rematarle en el segundo. Por la otra parte del cuadro, el frontón Simon jugó a gran nivel derrotando a Tipsarevic y Tsonga. Aunque poco pudo hacer contra “el amo” del torneo, Rafa Nadal.
También realizaron un buen torneo Wawrinka y Tsonga. Los dos alcanzaron los cuartos jugando bastante bién. El suizo derrotó a Feliciano, Andujar (vencedor en Marruecos la semana anterior) y Almagro, demostrando así que habrá que tenerle en cuenta en los próximos torneos de tierra. Tsonga dejó fuera a Kohlschreiber y a un errático Verdasco que está lejos de su mejor nivel.
La gran decepción fue David Ferrer, perdiendo ante Bellucci los dos sets en su primer partido. No fue porqué el brasileño jugara un buen torneo ya que perdió después ante Haase en dos sets. Cierto es que David Ferrer tenía unas molestias pero en mi opinión me parece lamentable que salga a la pista para jugar a tan bajo nivel…
Otra nota muy negativa son las lesiones de Mónaco (hasta Roland Garros no podrá volver) y Benneteau (se rumorea que podria estar hasta 6 meses fuera de los torneos). Al parecer fueron lesiones provocadas por el mal estado de la pista.
En resumen, Rafa ha recuperado su mejor nivel en tierra, además de lo que supone el golpe moral de derrotar al Serbio y volver a ganar un gran torneo. Ahora vienen muchos partidos sobre esta superfície y seguro que volveremos a vivir otra final entre los dos primeros del ránking.
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